
Sin duda la tendencia de apoyarse en contratistas o empleados que serán 100% remotos es una tendencia que no va a parar.
Esto ha traído grandes beneficios empresariales, antes se dependía del talento que vivía o se encontraba cerca del sitio de trabajo, y hoy se puede tener a la mejor gente con los mejores servicios estén donde estén.
Adicionalmente, todo se ajusta de acuerdo con el comportamiento de la oferta y demanda, lo cual puede permitirnos gozar de personas muy calificadas a precios muy competitivos.
Y por si fuera poco, podemos gozar de personas trabajando todos los días todo el tiempo, por estar en diferentes usos horarios.
Hasta aquí todo es excepcional, sin embargo, esta modalidad de contrataciones remotas también conlleva nuevos riesgos y retos.
Dentro de los principales problemas funcionales de los negocios con contrataciones remotas encontramos:
- Falta de supervisión y control: Gestionar empleados a distancia puede hacer más difícil monitorear su desempeño y asegurar que las tareas se completen de manera eficiente. Esto puede generar problemas en la productividad y la calidad del trabajo si no se implementan sistemas de seguimiento adecuados.
- Problemas de comunicación: Las barreras de comunicación son comunes en entornos remotos, ya que no todos los empleados tienen acceso inmediato a información clave o la capacidad de colaborar en tiempo real. Esto puede llevar a malentendidos o retrasos en proyectos importantes.
- Seguridad de la información: El trabajo remoto incrementa los riesgos relacionados con la ciberseguridad, ya que los empleados pueden acceder a sistemas corporativos desde redes domésticas menos seguras o dispositivos no protegidos, exponiendo la información sensible de la empresa a ataques o filtraciones.
- Aislamiento y desconexión: Los empleados remotos pueden sentirse aislados, lo que puede afectar su compromiso con la empresa. La falta de interacción social puede disminuir la moral y el sentido de pertenencia al equipo, lo que influye negativamente en el trabajo colaborativo.
- Cumplimiento legal y normativo: Contratar personal remoto en diferentes regiones o países implica enfrentar una variedad de leyes laborales, fiscales y regulatorias. No cumplir con estas regulaciones puede tener consecuencias legales significativas, como multas o sanciones
Sin embargo, en mi opinión, el riesgo más delicado es el de personas de identidades falsas.
Al no hacer un estudio profundo de los candidatos, se puede tener a gente que se dice ser profesional, pero en realidad pueden ser delincuentes, o parte de una organización delictiva que tiene como fin último el robo de información, la manipulación de los sistemas para actos nocivos o inclusive el espionaje industrial o gubernamental.
Esto ha dado pie a toda una red de personas que adoptan personalidades falsas, se les contrata y ni son quienes dicen ser ni su propósito es meramente trabajar, sino ser facilitadores de algún tipo de acción de crimen organizado generalmente.
Por lo anterior, te propongo algunas acciones para evitar contratar a personas con identidades falsas con las siguientes recomendaciones:
- Verificación de identidad mediante tecnología: Utilizar herramientas que validen documentos oficiales como pasaportes o identificaciones nacionales a través de plataformas de verificación automatizada. Empresas como ID.me o Jumio ofrecen servicios que autentican la identidad con documentos y reconocimiento facial.
- Entrevistas por videollamada: Realizar entrevistas por videoconferencia es una manera de confirmar la identidad visual del candidato, asegurando que coincida con la documentación presentada. También ayuda a detectar inconsistencias en el comportamiento o la comunicación.
- Revisiones exhaustivas de antecedentes: Implementar un proceso de verificación de antecedentes que incluya la validación de historial laboral, referencias y, en algunos casos, verificación educativa. Servicios como Checkr y HireRight pueden ayudar a confirmar esta información.
- Contratar a través de plataformas de talento: Utilizar plataformas que ofrecen servicios de verificación de identidad y antecedentes como Upwork o Toptal puede garantizar un filtro adicional en el proceso de contratación.
- Autenticación de dos factores y acceso seguro: Una vez contratado, utilizar autenticación de dos factores (2FA) y tecnologías de gestión de identidades para proteger el acceso a los sistemas empresariales y asegurar que quien trabaja es realmente el empleado verificado.
Como conclusión, se puede afirmar que poder contratar talento de cualquier parte del mundo es algo muy atractivo, pero por igual se deberán de poner en marcha nuevos procedimientos que garanticen la integridad de las empresas contratantes, sus clientes, proveedores e información