Sí, me refiero a esa persona que tiene características muy peculiares, aquí  comento las principales:

·         Nunca pasa de 2 a 3 años en cada empresa que lo “mantiene” a lo más 4 años

·         Vende sus logros y habilidades como ninguno, pero eso solo queda en el papel, por eso lo contratan

·         Las empresas a veces no tienen memoria y en un período de menos de 20 años pueden llegar a re contratarlo, solo para corto tiempo después volver a despedirlo

·         Nunca toma responsabilidad de nada

·         Sabe comprometer a todas las personas menos él o ella, muchas veces argumentando “riesgo compartido” donde esta persona, no comparte nada

·         Evita que otras personas estén copiadas en sus intercambios de correo, aun siendo esto necesario

·         Tarda mucho en responder, si es que no le queda remedio, pues jamás regresa llamadas ni correo electrónico, inclusive mensajes de texto

·         Tiene un grupo de empresas o proveedores que lo saben “solapar” y son premiados con trabajo, cubriendo siempre los errores de esta persona, aun siendo más caros o peores que otras empresas más eficientes

·         Teniendo un “poquito” de poder es un(a)tirano(a). Ya sea por tener presupuesto, control o algún nivel de supervisión

·         Tiene especialidad en demostrar que el fracaso de sus iniciativas no fueron su culpa y/o era algo lógico y natural

Entre los puntos más comunes.

¿Cómo daña a la empresa?

El problema radica en que ocupa posiciones delicadas, generalmente que idealmente buscaban hacer crecer al negocio pero acaban siendo todo lo contrario.

Al ser seleccionado por un ejecutivo de alto nivel, las personas internas pasan de darle el beneficio de la duda en cómo opera o trabaja a una inconformidad generalizada, pero no le dicen nada al ejecutivo superior porque les preocupa que al hacerlo indirectamente le hacen ver que se equivocó en la selección.

La resultante es que todo un período (generalmente un semestre) lo que debía de pasar no ocurre, y es solo en el segundo período cuando el ejecutivo que lo contrató nota su error. Allí sucede lo más ridículo: en vez de correrlo, generalmente esta persona se coloca en otra área de la empresa, por más ridículo que suene. Allí el daño sigue ocurriendo. El negocio no se ejecuta.

Estas personas:

·         Hacen perder participación en el mercado.

·         Generan inconformidad entre áreas internas

·         Elevan los costos de operación al no ejecutar rápido o del todo

·         Limitan la rentabilidad que acaba de descubrirse tarde por sus formas de ocultar la información

·         Lo peor: hacen que se pierdan clientes y que los proveedores prefieran trabajar con la competencia

·         Normalmente son grandes generadores de cuellos de botella o todo se para en sus manos

·         Los proveedores empiezan a quejarse por su falta de contacto o acciones atropelladas

·         Nunca contesta o lo hace muy tarde

·         Alenta todo proceso en el que se involucra

·         Sabe hacer muy bien la barba a ejecutivos de alto nivel

·         Fue re contratado, esto es, trabajó antes en la empresa pero no hubo un recuento de sus actividades

·         Todo lo delega, en especial la responsabilidad del éxito (el cual sabe ganarse indebidamente) y es magistral en responsabilizar a otras personas de sus propios errores

¿Cómo detectar estas personas?

Mi conclusión es que es inconcebible que empresas de cualquier tamaño solapen este tipo de lacras empresariales. Si una de estas personas es detectada, se debe notificar a recursos humanos de forma instantánea, pero en especial se debe de anticipar el impacto al negocio, antes de que sea demasiado tarde. ¿Conoces a alguien así? Mándale esta nota, puede que se arrepienta y se ponga a trabajar. ¿Qué opinas?