¿Qué implica en los negocios la interfaz de cómputo cerebral (BCI)?

Interfáces de cómputo cerebral: ganar eficiencia, si pero, ¿a qué costo?

Las interfaces de cómputo cerebral conocidas comúnmente como BCI, del inglés “Brain Computer Interface” son sistemas computacionales capaces de recolectar señales del cerebro para luego analizarlas y traducirlas en comandos que pueden ser interpretados por diversos tipos de dispositivos con el fin de llevar a cabo algún trabajo, acción o trabajo.

Su origen tuvo que ver en un principio con poder ayudar a personas con parálisis severa el poder comunicarse y desempeñar tareas que sus cuerpos no les permitían.

Tiempo después se comenzaron a emplear cono herramientas de entrenamiento de neuro retroalimentación.

Hoy podemos ver diversos desarrollos que están acercando este tipo de tecnología al consumo masivo y con esto se abre todo un mundo de repercusiones en el ámbito empresarial.

BCI como herramienta de control

LA productividad empresarial es uno de los factores de mayor interés no importa la época. Ahora imaginemos que parte de las políticas de la empresa es el colocarse un dispositivo BCI que permita cuantificar el grado de atención y enfoque que un empleado está teniendo en el desempeño de una actividad a manera de proporcionarle al área de recursos humanos toda la información detallada del grado de concentración de todos sus trabajadores en el desempeño de sus trabajos, lo cual puede ver de forma concentrada en un reporte dinámico que le permite ver a lis más y menos enfocados.

Así en una planta industrial, por ejemplo, los supervisores podrían contar con un sistema de alertamiento de las personas que no tienen buen nivel de atención y son propensos a tener un accidente o cometer un error.

O, visto desde otro punto de vista, ¿qué tal que el área de recursos humanos otorgue bonos a los más enfocados y castigue el pago de los menos enfocados? Sin duda un dilema de ética laboral.

BCI anticipando preferencias

En el mundo de las convenciones hoy todavía el contar con un espacio en el área de exposiciones es la forma de monetización de estos eventos, aparte de grandes patrocinadores, que, de cualquier forma, reciben un espacio de exhibición como parte del patrocinio.

La esperanza de los organizadores de convenciones es que todos los expositores logren buenas oportunidades calificadas de prospectos que se conviertan en clientes.

Pensemos por un instante que en vez de un gafete de registro se otorguen dispositivos BCI a los participantes de la convención y que todas las personas con un área de exhibición sean capaces de anticipar qué persona estará interesada en lo que ofrecen antes de que diga una sola palabra y así, solo se dirijan y enfoquen en los que saben que tienen interés y “desechen” a los que no presentan interés.

Esto es solo un ejemplo de cómo eventos de negocios podrían cambiar radicalmente.

BCI controlando dispositivos

¿Qué tal poder pasar las láminas de una presentación con solo pensarlo? O ¿no abrir la boca y hacer que la computadora efectúe una serie de tareas? O ¿Pensar la propuesta o documento que quieres escribir y de inmediato se vacía tu pensamiento en el procesador de palabras? Todo esto no está muy lejos de ser una serie de aplicaciones de uso común con BCI. Después de todo, esta fue la razón original de la creación de la tecnología de BCI.

Conclusión

BCI puede prometer ambientes de trabajo que puedan auto balancearse al poder ver los índices de enfoque de las personas, puede anticipar errores y accidentes, desde un chofer que no está concentrado hasta detectar que el nivel de estrés de una persona es alto y puede tener un problema cardíaco.

Por igual, las empresas que adopten esto para sus empleados pueden abusar de esta tecnología y volverse tan dependientes de ella para monitorear el desempeño, evaluar el entrenamiento recibido o el crecimiento profesional de una persona, dejando a un lado otras medidas de desempeño y evaluaciones.

Tenemos que entender que, aunque es una tecnología muy interesante, también puede tener desperfectos y errores, puede inclusive ser sujeta de hackeo y entonces un tercero malintencionado puede conocer tus pensamientos de forma ilimitada.

¿Y qué decir de la privacidad de la información de quien emplee esta tecnología? Estamos viendo un camino aún no recorrido, que puede tener implicaciones severas.

Sin embargo, y sin duda, esta tecnología está permeando en el medio empresarial, y mi recomendación a los estrategas en las empresas es el revisar el estado de avance en su segmento de mercado e ir pensando en las estrategias o planes de incorporación que les brinden buenas ventajas competitivas.